Ayer me encontré con una vieja amiga después de muchos años, hablamos toda la tarde, nos pusimos al día y recordamos algunos momentos, algunas vivencias en las que estuvimos juntos.
Ha sido un bonito encuentro.

Hablamos de muchas cosas, reímos, lloramos, hicimos preguntas, pensamos y reflexionamos.
Nuestra charla de horas nos encontró hablando del presente, viviendo el presente, no existía nadie más que nosotros dos, no había nada más, sólo nosotros dos y nuestra charla.
Ahora mientras te digo esto repaso mis palabras y las siento con todas mis tripas, con todas mis células.
Lo afirman muchos credos, muchas ramas de pensamiento, vivir hoy y ahora. Qué importante es vivir el presente…
Con mi amiga también hablamos del pasado, el pasado que algunas veces no queremos soltar.
Siento que es importante recordarlo pero al mismo tiempo siento mucho más que es necesario y saludable dejarlo atrás.
Yo trabajo a diario con mi pasado en mi Libro de Luz, herramienta que comenté en el programa de ayer titulado El Ego y la Luz.
No me quiero ir por las ramas, hoy quiero compartir una historia de Buda que habla del presente y del pasado.
Espero que te guste y que te haga reflexionar.
Muchas gracias.
El audio de este artículo no se encuentra disponible en este momento pero muy pronto lo encontrarás aquí mismo. Si tienes alguna duda por favor escríbeme desde el apartado Contacto.
Deja una respuesta